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octubre 31, 2022

“El feminicidio es el conteo que no queremos hacer”


La directora de la Fundación Feminicidios Colombia, Gloria Roncancio, propone ‘Darle la vuelta al iceberg’ en su reciente libro para erradicar los atroces hechos.

Una lucha incesable y con rigor ha tenido que emprender la mujer para gozar de una integridad plena en la sociedad. Su recorrido parece estar sumergido en un túnel sin salida que carece de respuestas y soluciones oportunas.

Y es que la violencia se convirtió en el episodio cotidiano de miles de mujeres que hoy ya no están y otras que transitan una batalla para castigar los deplorables actos de los que han sido víctimas.

La desigualdad y discriminación hacia este género ha desencadenado una disputa de siglos. En la Edad Media se afianzaron muchas de las ideas de desigualdad de las mujeres que aún siguen vigentes. Los nobles golpeaban a sus esposas con la misma regularidad que a sus sirvientes. 

La muerte violenta de las mujeres por razones de género obedece al feminicidio, hecho del que ya han sido víctimas 392 mujeres en Colombia a corte de agosto de 2022, de acuerdo con datos del Observatorio Colombiano de Feminicidios.

Además, en el país, entre 2018 y 2021, según cifras del Observatorio de Violencias contra la Mujer de la Fundación Feminicidios Colombia, 25 niñas fueron asesinadas por sus parejas, hombres y adultos, de las cuales dos de ellas ya eran madres. 

Ingresar a esta cruda lista es el temor diario de una mujer en Colombia. Esto se agrava cuando los sucesos indican que las agresiones, en diversas ocasiones, son provocadas por la misma pareja de la víctima.

El panorama es desalentador y los abusos representan “una cotidianidad atroz”. Palpar este acto fue  una de las escenas más aterradoras en la vida de Gloria Yamile Roncancio, una abogada boyacense con especialización y maestría en Derecho Administrativo que en diciembre de 2014 fue víctima de violencia sexual por parte de su expareja.

Roncancio entabló una denuncia ante la Fiscalía en contra del fraile y profesor universitario Andrés Hernán Muñoz González, a quien acusó de abusar de ella en el municipio de Villa de Leyva (Boyacá). En ese momento, la Fiscalía le imputó al religioso el delito de acceso carnal violento, pero, hasta el día de hoy, el hombre continúa en libertad.Una defensora de la vida

Previo a la agresión, la mujer había terminado su maestría en Derecho Administrativo y posterior al suceso siguió laborando para el Estado en hospitales. Luego decide trasladarse a Cartagena para vincularse con el Ministerio de Defensa.

“Estando allá es que yo empiezo a hacerme preguntas sobre por qué la vida de las mujeres es como es. Quizá yo antes de la agresión no había sido muy consciente de las violencias que se reciben y mi formación como abogada tampoco me lo permitía ver porque en esa época no se hablaba mucho de mujeres como ocurre ahora”.

En 2018, Gloria decide revisar los feminicidios y  cuestionarse el porqué en el país no se hablaba del tema y no pasaba nada con tales hechos. Es por ello que nace la idea de hacer un observatorio independiente que en redes sociales inició con el hashtag #Elconteoquenoqueremoshacer.

Ese mismo año finaliza su labor con el Ministerio de Defensa y decide poner su conocimiento y experticia al servicio de las mujeres.

“Las victimas de abusos sexuales son muy desamparadas, nadie se preocupa por ellas y yo había sufrido violencia institucional, porque yo denuncié y ya se van a cumplir ocho años sin condena”.

Es así como después de varios años de prestar sus servicios a diferentes entidades del Estado como asesora y apoderada judicial, y ejercer la docencia universitaria, creó la Fundación Feminicidios Colombia, de la cual es fundadora y directora. En esta  representa jurídicamente  a familiares de las víctimas de feminicidio y a mujeres sobrevivientes. Además, trabaja activamente en la educación sobre derechos humanos de las mujeres.

En febrero de 2019, Gloria logra registrar esta entidad sin ánimo de lucro en Cartagena, la cual tiene  presencia en 23 departamentos y desde entonces ha logrado impactar a 25 familias víctimas y 22 mujeres sobrevivientes.

‘Dale la vuelta al iceberg’, de Gloria Roncancio.CortesíaDarle la vuelta al iceberg

Para la abogada, no hay nada que deba apasionar más que la defensa de la vida y así lo ha palpitado en el trayecto que ha recorrido y en el que determinó una serie de vivencias, análisis y reflexiones que plasmó en su libro Dale la vuelta al iceberg.

Desde octubre de 2021, Gloria empezó a darle vida a 118 páginas que relatan cómo decidió romper el habitual ciclo de espera por la sentencia en contra de su agresor y actuar para ella y las cientos de víctimas que también padecieron un episodio de violencia y por aquellas que hoy engrosan las listas de víctimas de agresiones mortales en el país.

Para ello, aborda dos herramientas, una de ellas es el ‘violentómetro’, que es un nivelador de violencia para saber y conocer cuándo una persona sufre violencia de género.

La otra es ‘el iceberg’ y cómo lograr darle la vuelta, pues Gloria plantea modificarlo e invertirlo en aras de entender un feminicidio fuera del marco habitual, yendo más allá de la muerte.

“Darle la vuelta al iceberg es por un lado cambiar la mirada y dejar de fijarnos específicamente en la muerte. Cuando se propone el ¿tú que tienes que ver con los femincidios? está relacionado con conductas que trae el iceberg y en el que estamos todos sumergidos”.

Para Gloria, se ignoran una serie de conductas que podrían evitar el fatal desenlace.

“Si seguimos mirando la muerte seguiremos ignorando cómo se acaba la vida de todas a diario, aun cuando sigamos como yo, con vida”.Ruta a seguir para la atención en la Fundación Feminicidios

A través de la página web de la Fundación Feminicidios Colombia las personas podrán solicitar una representación judicial gratuita y para ello se dará prelación a quienes cumplan con requisitos como que el tipo de caso incluya a familias, sobrevivientes o víctimas rurales, campesinas, de minorías étnicas y migrantes. 

“Cuando ya hay un feminicidio consumado y de sobrevivientes a tentativas de feminicidio pues a estas mujeres lo que hacemos es su representación judicial dentro de los procesos penales”, indicó Roncancio.

A partir de esta representación buscan impactar a quienes desarrollan funciones públicas para que su forma de atender a las mujeres y a las familias se modifique con el fin de proteger sus derechos como víctimas.

Para la abogada, el aparato judicial debe modificarse si se quiere avanzar en una eficaz garantía de derechos para la mujer. 

“El sistema judicial no se va a modificar y la garantía de derechos no se va modificando para las mujeres y en favor de ellas si la forma en la que se educa a quienes ejercemos el derecho no se modifican”.

Además, enfatizó en que debe tener la importancia que se requiere para cada uno de los casos y situaciones que involucren a las mujeres.

“La importancia es que se ponga la mirada en la radio nacional de los derechos humanos de las mujeres, pero se sigue viendo como si fuera un relleno, como cualquier cosa que no tiene importancia”.

FUENTE: https://www.elheraldo.co/


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