Madrid,(EFE).- La ministra de las Mujeres, Géneros y Diversidad de Argentina, Elizabeth Gómez Alcorta, aseguró este jueves en Madrid que la relación que mantiene con el recién nombrado jefe de Gabinete del Gobierno argentino, Juan Manzur, es “cordial en términos institucionales” y que la agenda de género “está a resguardo”, ya que sigue siendo una prioridad para el presidente del país, el peronista Alberto Fernández.

Gómez Alcorta, de visita en la capital española, participó hoy en la Tribuna organizada por EFE y Casa de América, y en ella explicó su relación con Manzur, cuya llegada al equipo de Gobierno de Fernández ha levantado ampollas entre los grupos feministas argentinos, por algunas decisiones adoptadas como gobernador de la provincia de Tucumán, en especial el rechazo, en marzo de 2019, de otorgarle a una niña de 11 años el derecho a un aborto legal tras haber sido violada.

Esa decisión generó una denuncia penal por parte de Gómez Alcorta cuando todavía no era ministra, “pero si abogada y defensora de los derechos humanos”.

“En términos institucionales la relación es muy cordial”, indicó la ministra, “pero es cierto que cuando (Manzur) fue designado como jefe de Gabinete salió a la luz un hecho que en todas las anteriores ocasiones en las que nos habíamos reunido no había salido”.

Gómez Alcorta señaló que desde que asumió como ministra, en diciembre de 2019, tuvo varias reuniones en Tucumán con Manzur y, “de hecho, a pesar de que es una de esas provincias a las que todavía les falta algunas normativas, hemos podido trabajar muy bien, sobre todo con la secretaria de la Mujer de allá, con mucha cercanía”.

Incluso, apuntó, con el actual jefe de Gabinete como gobernador “hemos puesto en marcha en esa provincia el Consejo General de Prevención de Feminicidios, que es a nivel nacional”.

“La relación es cordial y la agenda de género está a resguardo, es una prioridad del presidente de la nación y de la vicepresidenta (Cristina Fernández). La tarea que viene a cubrir el jefe de Gabinete es una tarea política, de reactivación de ciertas áreas, y claramente la agenda de género no está incluida entre ellas”, reiteró Gómez Alcorta.

Manzur es uno de los últimos cambios realizados recientemente en el seno del Gobierno argentino, muy criticado también por escasa presencia de mujeres en cargos de responsabilidad, una realidad que la ministra reconoce, ya que solo un 37 % de las argentinas ocupan puestos de responsabilidad en las instituciones.

Pero hizo énfasis a pesar de todo en la “buena política” que se está realizando en ese sentido, ya que todos los gobiernos regionales, salvo tres, tienen normas para la paridad, aunque en general en lo legislativo y judicial está aún bastante lejos: “Todavía las fotos de poder siguen siendo fotos de varones”.

UNA LEY DEL ABORTO “MUY ROBUSTA”

Argentina aprobó el derecho al aborto gratuito y asistido médicamente el 30 de diciembre de 2020, y el seguimiento realizado desde entonces indica que “la ley se aplica en todo el país”, dijo la ministra de las Mujeres.

Gómez Alcorta explicó que desde la entrada en vigor de la norma algunas provincias del país están teniendo “una actitud muy proactiva”, pero en otras la objeción de conciencia, que la ley establece y garantiza, está generando problemas.

Sin embargo, “el Ministerio de Salud garantiza que ninguna mujer se quede sin acceso. Si hay una situación de objeción de conciencia la ley obliga a hacer las derivaciones necesarias”, aclaró.

El derecho al aborto libre hasta la semana catorce de gestación se ha encontrado también con otros obstáculos, con más de 40 acciones judiciales contabilizadas que buscan su derogación. “Pero es una ley muy robusta y por eso no se ha conseguido ni siquiera una medida cautelar”, precisó la ministra.

UN ESTÁNDAR ÚNICO FRENTE A LOS FEMINICIDIOS

A pesar de los “grandes avances” llevados a cabo por el país en los últimos años en materia de género y diversidad, Gómez Alcorta señaló que uno de los retos es el de los feminicidios y travesticidios, una lucha que requiere del establecimiento de “unos estándares mínimos en capacitación policial, judicial y en sistemas de búsqueda, en todo el país, ya que en la actualidad las actuaciones dependen de los gobiernos provinciales.

“Hay que involucrar mucho a las provincias y municipios, porque las mujeres piden ayuda donde la tienen más cerca, no al Estado. Hay que crear mucha institucionalidad”, indicó.

También hizo hincapié en el empleo femenino, “que ha sufrido un gran retroceso en estos años”. “Hay una reactivación, pero sin las mujeres, por eso son necesarias políticas sectoriales. Siete de cada diez de las personas más pobres en Argentina son mujeres. Hacen falta políticas más contundentes”. 

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