El lunes 25 de junio se cometió un homicidio contra otro líder en este municipio.

El alcalde de Ituango (Norte de Antioquia), Hernán Álvarez, confirmó el asesinato, este 27 de junio, de otro líder social en el municipio. La denuncia la hicieron diferentes organizaciones sociales de la zona.

De acuerdo con la información preliminar entregada por las organizaciones de derechos humanos, la víctima fue identificada como Julio Sucerquia, quien era integrante de la Asociación de Comités de Barequeros del Norte de Antioquia (Asocbare-NA).

Asimismo, formaba parte del campamento de refugio humanitario instalado en el sector de Líbano, debido a la contingencia en Hidroituango, en el que varias familias llevan más de un mes.

Para las organizaciones sociales es preocupante que este es el segundo líder socialasesinado en menos de dos días y el tercero en dos semanas, en Ituango.

El Departamento de Policía de Antioquia investiga los hechos para dar información específica. Hasta el momento, ha logrado determinar que el hecho se presentó a las 4:15 de la tarde, en la vereda Los Galgos. El homicidio se cometió con arma de fuego y se desconocen las causas o presuntos responsables.

“Nos informan que hombres armados llegaron hasta su vivienda y le propinaron varios disparos que acabaron con su vida”, dijo Yesid Zapata, coordinador del nodo Antioquia de la Coordinación Colombia Europa Estados Unidos (Cceeu), quien añadió que rechazan este y los últimos homicidios que se han presentado contra defensores de derechos y líderes sociales y comunitarios.

Añadió que en Antioquia ya van 12 líderes asesinados en este año.

De acuerdo con Jorge David, presidente de la Red de Organizaciones Sociales y Campesinas del Norte de Antioquia, en Ituango la situación es preocupante, pues es el primer municipio de la zona en asesinatos de líderes sociales, también es el de más homicidios a exintegrantes de las Farc que dejaron las armas.

En este municipio confluyen el Eln, el Clan del golfo y sus disidencias, así como disidencias de las Farc. Entre tanto, en el Norte hay dificultades por aumento de amenazas a los líderes dedicados a la sustitución de cultivos ilícitos.

FUENTE: EL TIEMPO