Lizeth Sanabria grabó un video en el que quedó en evidencia la conducta del profesor Freddy Alberto Monroy, exdirector de un programa de maestría de la Universidad Nacional. SEMANA habló con la estudiante.

Lizeth Sanabria grabó el acoso del que fue víctima por parte del profesor y exdirector de la Maestría de Enseñanza de las Ciencias Exactas y Naturales, Freddy Alberto Monroy. En las imágenes se ve cómo el profesor se acerca a su rostro y cómo la sujeta con el brazo para que no se aparte de él. Ella afirma que Monroy fue cordial cuando asumió su papel como director de tesis, pero después empezó a hacer acercamientos inapropiados. Ambos avanzaron en la asesoría académica hasta que las muestras de acoso empezaron a ser evidentes.

Ante la negativa de la estudiante, esta decidió comunicarle que ya no deseaba que él fuera la persona que asesoraría su trabajo de grado. La decisión de apartarse de Monroy se dio cuando en un laboratorio oscuro de la universidad la tocó y la empujó contra una pared. Ese día Sanabria entró en depresión e hizo efectiva su carta en la que le pedía cambiar de tutor y a cambio Monroy le respondió con otra carta en la que renunciaba a ese puesto.

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Sin embargo, ante las ganas de no quedarse callada, decidió comunicarle al profesor que volviera a su oficio de tutor, todo con la estrategia de que reincidiera en actos de acoso para grabarlo y tener una evidencia. Cosa que finalmente pasó.

Este jueves, el rector de la Universidad Nacional, Ignacio Mantilla, publicó un comunicado en el que lamenta los hechos. “Se empezó a surtir la atención que prevé el protocolo antes mencionado. Esto incluye la iniciación del trámite disciplinario al profesor implicado, el cual se desarrollará cumpliendo el debido proceso”.

Por su parte los estudiantes de la Universidad Nacional no se han quedado callados y han mostrado su apoyo total a la estudiante de maestría. Con una marcha en la plaza mostraron su indignación y manifestaron que se le debe aplicar al profesor un proceso sancionatorio.

SEMANA: ¿Cómo conoce a Freddy Monroy y como termina siendo el tutor de su tésis?

LIZETH SANABRIA: Yo me presento al programa de maestría de Enseñanza de las Ciencias Exactas y Naturales. En ese momento, el profesor es el director y mi campo de trabajo es la biología, el de él es la física. Él me dice que quiere trabajar en algo referente a biología. Me hace la propuesta de un proyecto transversal y me pareció interesante porque desde el principio tenía un proyecto de tesis que podría funcionar. Desde el principio él se mostró interesado en mi parte académica, y como era el director yo le tenía plena confianza. Después él como asesor de tesis organizó lo tiempos de trabajo y en esos tiempos no reuníamos y siempre mostraba interés en la parte académica, y fue muy cordial.

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SEMANA: ¿Cómo comienzan las manifestaciones de acoso?

L.S.: Empieza a decirme que le gustan mis ojos o me decía que era su consentida, “deberías regalarme tus ojos”, y ya empieza a tocarme la mano y trabajar más de cerca. Yo intento sortear la situación y direccionaba todo hacia el trabajo, me mandaba la mano a la rodilla, y yo para que dejara esa actitud le contaba que tenía pareja. Yo nunca supe nada de la vida de él porque todo era lo académico.

SEMANA: ¿Qué fue lo que él le hizo para que decidiera denunciarlo?

L.S.: Fue en una sesión del laboratorio de física, él me coge contra la pared, me dice “tú me gustas mucho, te quiero sentir, te puedes portar bien”. Luego me dijo  que podíamos tener dos tipos de relaciones, una académica y otra “más allá”. Que si yo podía ir “más alla” él se comprometia mucho con mi trabajo, luego me toca los senos, la cola y me empuja contra la pared, yo estoy temblando y pienso en la manera de salir rápido. Él me dice que me tranquilice y que no me va a meter la lengua a la boca. Salgo llorando, me desplazo al campus y me siento a llorar, me siento terrible. Llamo a mi hermano y le digo que no quiero volver a ver a ese tipo y que quiero renunciar a la maestría. Mi hermano me dice que no puedo perder la plata. Me siento en una situación muy difícil porque invertí mi tiempo y mi plata.

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SEMANA: Le termina diciendo que quiere cambiar de director de tesis…

L.S.: Yo le digo que deseo cambiar de director y tras del hecho pregunta que por qué, le digo que por motivos personales y él renuncia a ser mi director. Yo cumplí un año sin volver a la universidad. Un día una compañera me dice que le tiene pavor a Monroy y me dijo que una vez le metió la lengua a la boca y “cada vez que lo veo me da miedo y me escondo”. Ahí decido que lo voy a denunciar, no puede ser que él haga eso con las estudiantes.

SEMANA: ¿Cómo ocurre lo del video?

L.S.: En enero él me escribe que “qué pasa, qué cuenta” y que si voy a volver a la universidad y me habla como si nada. Yo le dije que sí voy a volver. Y charlamos de mi tesis de grado, él me cita y yo no fui capaz de ir esa vez. Me vuelve a citar un viernes y ya me siento segura y voy, durante mi trayecto a la universidad voy llorando y voy decidida a grabarlo.

Yo llego y está con unos compañeros de física. Me dice “vamos y nos tomamos un tinto” y me cuenta cómo le ha ido en la universidad y en el trabajo. En un momento me dice que tenemos que ir a la oficina a ver una cosa de la plataforma y ahí es donde hice el video. Empezamos a hablar de cosas académicas. Dice que esto lo hago por ti y siempre me pone presente que me esta ayudando mucho. Llega un momento donde estamos sentados cerca y el intenta besarme, yo me levanto para despedirme, yo nunca intenté reaccionar con violencia porque ese profesor me produce miedo y sensaciones de tristeza. También tenía mucho temor porque estaba grabando y de hecho se me cae un tarro de agua porque estaba nerviosa. Me toca la cintura y dice que me quiere sentir.

No pasa nada, él se levanta y cuando me pongo de pie me pone la mano en la cola y debajo de la blusa, le digo que estoy comprometida y que me tengo que ir, salgo de la oficina tengo el video y me pregunto ¿qué voy a hacer ahora?. Aparece una persona experta en demandas y nos da una asesoría, me dijo que teníamos que hacer un escrito, lo pasamos por la universidad y la Fiscalía y lo acusamos por acoso sexual violento. Luego contactamos con una periodista y se hace público.

He recibido muchos mensajes de mis compañeros y han aparecido como seis personas que me han dicho que han sido víctimas y muchos tienen miedo por el poder que tiene ese profesor.

SEMANA: ¿Cómo ha sentido el apoyo de los estudiantes?

L.S.: Me he sentido muy apoyada por toda la Universidad Nacional, exigen que sea retirado de su cargo, me habían dicho que en otra universidad también trabajo, de la universidad me ofrecieron apoyo psicológico y jurídico. No ha sido fácil para mí hacer esto. No quiero que algo así le vuelva a pasar a una persona.

FUENTE: SEMANA